1.8.06

Me confieso «geek»

Me confieso geek porque recuerdo a qué huele un disco de acetato (y cómo se ve un eclipse a través de uno), porque sé manejar DOS y conozco lo que es unix, telnet, whois y ping (y esperar un pong que nunca llega). Me confieso geek porque recuerdo el ronroneo incesante de la 386, porque puedo hablar con tanta pasión de una Commodore 64 como de la última reedición de un disco de los Beatles. Me confieso geek porque con sólo ver la combinación de colores sé reconocer el sistema operativo que se está usando, porque en mis tiernos (?) 26 reconozco cosas que es normal que reconozcan los de 40 para arriba. Me confieso geek porque me seduce más el conocimiento de lenguajes de programación que el de idiomas de comunicación (ja esa no me la cree nadie: lo mejor es cuando van juntos). Me confieso geek porque me divierto mirando una pantallita cuadrada que entretiene cuando no trabajo y que me da el sustento cuando sí lo hago.

Me confieso geek porque prefiero mil veces ser «geek» a ser «chic».

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es sólo una cuestión de época, de la que nos ha tocado vivir. Antes, a estas personas oplifacéticas se las llamaba hombres o mujeres del Renacimiento.

:-) Yo lo llamo curiosidad vital.

Me alegro de verte de vuelta, Natalia.

P.

Natalia dijo...

Gracias, Pilar.
Mi autoparticipación va de la mano con mi inquietud. Este blog es un termómetro de si estoy despierta o no.

Gracias por los saludos en la lista.

Saludos.

Nat.

Anónimo dijo...

Como el mío... Aunque el mío también demuestra el grado de incredulidad o de ganas de pegar cuatro voces. Bah, estamos vivas. Que se nos note.

En cuanto a Traducción, no es una lista demasiado cordial. Descubrirás, además, que tiene más peso la versión castellana que cualquier otra. No obstante, puede ser una lista muy valiosa. Me alegro de verte por allí

Un beso,

P.